Uno de los medios de transporte más utilizados es el tren, cada día miles de personas viajan en él para desplazarse de una parte de la ciudad a otra. Aunque sólo ser más común utilizar el metro, ya que debido a su disposición es mucho más fácil de entender, el tren es muy necesario, puesto que es el medio de transporte que conecta la capital con los municipios y ciudades que se encuentran en las afueras de Madrid. Pero si nos paramos a pensar hay un dato muy curioso, lo normal es que el número de líneas vaya en orden consecutivo, pero no es así, pues la línea C-6 no existe y pasa directamente de la C-5 a la C-7.
No existe la línea C-6 de cercanías
Un dato del que no se da cuenta todo el mundo, pero que despierta la intriga de los más curiosos, es que la línea de cercanías C-6 no existe. Cercanías se creó en 1989 y hasta entonces los trenes que realizaban servicios a las afueras de Madrid se identificaban por su destino, pero no tenían nombre ni marca.
Renfe quiso acabar con eso y dio identidad común reorganizando las líneas, ideando la marca, el logotipo y el mobiliario de las estaciones y fijándose en el metro, diseñó el mapa de la red. Por eso los trenes dejaron de calificarse como tal y nacieron las líneas, que son las siguientes:
- C-1: Príncipe Pío – Aeropuerto T4
- C-2: Guadalajara – Chamartín – Alcalá de Henares
- C-3: El Escorial – Aranjuez
- C-4: Colmenar Viejo – Parla
- C-5: Móstoles El Soto – Atocha – Humanes
- C-7: Príncipe Pío – Alcalá de Henares
- C-8: Cercedilla – Chamartín – Guadalajara
- C-9: Cercedilla – Cotos (línea de montaña)
- C-10: Villalba – Chamartín – Aeropuerto T4
Pero, ¿por qué no existe la línea C-6? ¿Se trata de un error? La realidad es que no es un error, pero desde su nacimiento ya hubo problemas. Las líneas de Cercanías Renfe son redes ferroviarias que conectan los municipios, pueblos y ciudades de Madrid con el centro de la capital.
Al principio existía la C-6 e iba de Laguna a Móstoles, pero en 1991, debido a las necesidades demandadas por el crecimiento de la capital, se fusionó con la C-5, eliminando así la primera y dejando una única línea bajo el nombre de C-5.
La C-1 tampoco tenía la misma línea que ahora, sino que empezó siendo Cantoblanco-Vicálvaro, un destino que dejó de existir de 2008 a 2011 y reapareció de esta manera. El trazo de Cantoblanco a Vicálvaro se fusionó por dos partes: por un lado con la C-2 y por otro con la C-4, que solo era Parla-Atocha, pero con la apertura del túnel entre Atocha y Chamartín pasó a ser Parla-Colmenar Viejo (C-4B) y Parla-Alcobendas (C-4A)
Se trata de un dato curioso que no es conocido por muchas personas, pero estas líneas de tren transportan a diario a una gran cantidad de pasajeros, ya que es uno de los transportes públicos más importante y utilizados en la Comunidad de Madrid. En promedio, hay más de 900.000 personas que utilizan el Cercanías de Madrid cada día laborable, aunque son datos que pueden cambiar dependiendo de la época del año, los eventos especiales y situaciones extraordinarias.
Por eso es un dato llamativo que muchas personas no se hayan dado cuenta de que la línea C-6 de Cercanías no existe en la Comunidad de Madrid, sobre todo si tenemos en cuenta que la línea C-5 es la más utilizada de toda la red. Y es que pasa por importantes núcleos urbanos y estaciones clave, además, es una línea muy concurrida porque atraviesa áreas densamente pobladas del sur de Madrid, lo que hace que sea un eje fundamental en la movilidad de la capital.