El Santiago Bernabéu de Madrid está en boca de todos. Desde que arrancaran las obras de remodelación del estadio en mayo de 2019, el edificio situado en pleno distrito financiero de la capital ha sido objeto de todas las miradas de quienes atravesaban el Paseo de la Castellana. Un proyecto en el que el Real Madrid ha invertido más de 1.000 millones de euros pero que rentabilizará con holgura gracias al lavado de cara del emblemático edificio y al plan económico que se ha trazado desde el club blanco.
En un lugar privilegiado de Madrid, el estadio Santiago Bernabéu se ha convertido no sólo en un templo del fútbol -que ya lo era- sino que ahora ha pasado a ser el escenario predilecto de los mejores cantantes del panorama nacional e internacional.
Tras las obras de remodelación del estadio -que todavía continúan pero que ya permiten la celebración de eventos en su interior-, el nuevo Santiago Bernabéu pronto se convirtió en el espacio favorito de los madrileños para ir a festivales y conciertos.
El primer gran evento celebrado en el Santiago Bernabéu fue el festival ‘Locos por la música’, que duró siete horas y reunió a 25.000 personas que cantaron junto a aristas como Amistades Peligrosas, Jaula de Grillos, OBK o Modestia Aparte. Sin embargo, el boom por los conciertos en el Bernabéu explotó con la llegada de Taylor Swift.
La ‘swiftmania’ llegó a Madrid para darlo todo al ritmo de la artista estadounidense más famosa del momento. Los conciertos de Taylor Swift en Madrid fueron los días 29 y 30 de mayo, pero la locura desatada por los fans comenzó un poco antes.
Las colas para ver a Taylor Swift iban creciendo y cada vez más fans se acumulaban a los alrededores del Santiago Bernabéu para ser las primeras en entrar al estadio para situarse en las primeras filas y poder ver de cerca a la artista. Pero claro, recordemos que el Bernabéu está situado en pleno Paseo de la Castellana, uno de los lugares más transitados de Madrid, y la imagen de tiendas de campaña abiertas en plena calle con cientos de jóvenes esperando en el suelo junto a los viandantes que van de compras, los vecinos de la zona o los que trabajan en el distrito financiero, puede resultar algo chocante.
Y claro, las quejas no tardaron en llegar. Decenas de vecinos de los edificios situados al lado del estadio Santiago Bernabéu contemplaban desde sus ventanas con asombro el espectáculo. Da igual que el cartel de ‘sold out’ se colgara horas después de que las entradas salieran a la venta, ellos tenían vistas privilegiadas al escenario desde su salón.
Aunque, más que vistas -porque el techo retráctil del estadio está cerrado durante los conciertos-, el problema es que el sonido de los potentes altavoces que llevan los grandes cantantes «sale por todos lados» y se puede escuchar a la perfección en los edificios colindantes.
Pronto llegaron sonómetros, los aparatos para medir los decibelios que constataban que la música del estadio superaba los niveles permitidos en zonas residenciales. Y a partir de ese momento surgió la Asociación de Perjudicados por el Santiago Bernabéu, que desde entonces lucha para llegar a un acuerdo con las autoridades para paliar las molestias que se puedan estar ocasionando a los vecinos.
Hace unos días el Ayuntamiento de Madrid anunció un acuerdo con el Real Madrid para que los conciertos del Santiago Bernabéu tengan que acabar, por contrato, como muy tarde a las 23:00 horas. Una medida que parece no haber sido suficiente para la asociación de vecinos, que se quejan de que con esta medida no se soluciona el verdadero problema, que es que «se están incumpliendo los límites razonables del ruido».
De hecho, el presidente de la Asociación de Perjudicados por el Bernabéu, Enrique Martínez de Azagra, asegura que es una situación «extremadamente grave» porque la situación puede considerarse de riesgo grave para la salud o seguridad de las personas cuando se superen los límites establecidos según la ordenanza municipal.
Martínez de Azagra va más allá y sentencia: «Lo que tienen que hacer es cerrar el estadio para este tipo de actividades que no estén licenciadas, no tienen licencia, no está insonorizado y , por lo tanto, que se dejen de milongas».
Más medidas en el Santiago Bernabéu
Mientras tanto, según han revelado fuentes municipales a la agencia EFE, desde el Real Madrid aseguran que van a colaborar en la «protección y limpieza de las zonas ajardinadas de los edificios colindantes y atenderá especialmente la zona de fans».
Además, Ayuntamiento de Madrid y el club blanco se comprometen a establecer medidas para facilitar el aparcamiento a los vecinos en la calle Rafael Salgado y se habilitarán más plazas para residentes en el aparcamiento multimodal de Castellana.
Desde el Real Madrid se comprometen también a activar una campaña de control de venta y consumo de alcohol en la vía pública en los alrededores del estadio para ayudar a la mejor convivencia con los vecinos de la zona.