Desconectar un poco del ruido de Madrid nos invita a descubrir las mejores escapadas rurales cerca de la capital. No es necesario recorrer kilómetros para poder sentir el silencio de la noche, el sonido de las gallinas a primera hora de la mañana o el simple movimiento del viento en las hojas, que es música para los oídos de alguien que vive en la gran ciudad. Afortunadamente, para todos aquellos que vienen de Madrid, o de visita, existen una serie de destinos rurales a sólo un corto viaje de distancia. Estos enclaves ofrecen la oportunidad de alejarse de la rutina y disfrutar de la belleza de la naturaleza, la tranquilidad del campo y la cultura local. Toma nota de cuáles son las mejores escapadas rurales cerca de Madrid.
Finca Torremilanos
Es un prestigioso viñedo y bodega situado en la Ribera del Duero, donde los amantes del buen vino podrán alojarse y empaparse de la tradición vinícola del lugar. Esta finca es conocida por producir algunos de los vinos más excepcionales de la denominación de origen Ribera del Duero, y es un destino perfecto para los amantes del vino que desean experimentar la cultura vitivinícola española en su máxima expresión. A lo largo de los siglos, ha sido una propiedad familiar que ha mantenido una dedicación constante a la viticultura y la producción de vino de alta calidad, por lo que un fin de semana de descubrimientos gastronómicos e históricos pueden ser una buena opción. De hecho, la Finca Torremilanos ofrece experiencias de enoturismo para visitantes interesados en conocer más sobre el proceso de elaboración y la degustación del vino.
La Torre Box Art Hotel
Collado Mediano es el lugar que acoge un escenario sin igual para obras de arte en plena montaña. Cualquier amante del arte disfrutará de las exposiciones que se alojan en este hotel rural, de estética diáfana y moderna. El enclave es espectacular, invita a inspirarse y a respirar aire puro. Con la libreta en mano para tomar notas o para dibujar el paisaje, podrás aprender nuevas habilidades y admirar las obras de los distintos artistas. Además, en este edificio se ofrecen los servicios de cualquier alojamiento. Muy cerca de Madrid, este enclave es uno de los mejores planes para cualquier fin de semana.
El Hotelito
El Hotelito está situado en Navaluenga a poco más de una hora y media de Madrid, a orillas del río Alberche y en la Reserva Natural del Valle de Iruelas y Sierra de Gredos. Es un destino perfecto para reconectar con la naturaleza. Se puede practicar golf, senderismo, vela, piragüismo, bicicleta o ruta con fotógrafo. La proximidad de ciudades Patrimonio de la Humanidad como Ávila, Salamanca, Segovia o Toledo resulta un atractivo complementario para realizar turismo de interior. Es una auténtica joya como escapada rural. Aquí descubriremos una casa que respeta el medio ambiente al máximo. Los textiles son de materiales reciclados y, además, tiene su propio huerto para ofrecer al visitante una comida muy especial. Una ensalada de lo más fresca o un zumo con fruta recién cogida del árbol no tiene precio.
Convento del Giraldo
Situado en el casco antiguo de Cuenca, a escasos metros de la Catedral y de la Plaza Mayor, el hotel debe su nombre a una de las torres del palacio en que se ubica. Sus 34 habitaciones, su restaurante y su spa son de gestión familiar. La historia adquiere especial relevancia en este lugar en el que perderse, porque el edificio conserva la arquitectura de su fachada blasonada, los artesonados y su fuente medieval. Pasearse por este lugar dejará un buen sabor de boca, dejando atrás el estrés y las malas vibraciones de la semana, en un convento convertido en hotel de 4 estrellas y en un restaurante donde degustar unos platos de lo más deliciosos y reconfortantes. Es un lugar con mucho encanto que combina perfectamente tradición y modernidad.
Las Rozuelas
Las Rozuelas es un hotel rural cerca de Madrid, en Cercedilla, con una atmósfera única con vistas al Valle de la Fuenfría, repleta de fresnos, cedros y pinos. Esta vegetación es una excusa perfecta para coger el coche y trasladarse a este hotel rural. Habitaciones con terraza y con chimenea invitan a vivir al máximo la experiencia de estar en un pueblo con encanto. Esta casa de piedra de los años cuarenta es una auténtica maravilla en muchos sentidos, ya que está integrada completamente en el entorno natural. La historia del lugar, mezclada con el diseño de las habitaciones es lo que acaba marcando la diferencia. Todo esto, unido a una buena oferta cultural, ocio y aventura, configuran un municipio ideal para disfrutar del tiempo libre, unas vacaciones o una escapada de fin de semana.
Hotel Nabia
El hotel Nabia es un hotel de lujo ubicado en el Valle del Tiétar. Las casitas independientes de este hotel rural con vistas a la sierra de Gredos, en Candeleda, Ávila, son el lugar perfecto en el que perderse cerca de Madrid. Es un hotel sólo para adultos. Para aquellos que quieran descansar y desconectar de la rutina. En este lugar hay hasta una carta de almohadas para que estés como en casa en una habitación con chimenea para vivir en primera persona un ambiente rural de puro lujo. Sus 12 habitaciones con grandes ventanales ofrecen toda la belleza del entorno a sus huéspedes. Además, cuenta con actividades al aire libre, rutas a caballo o en bici, senderismo y visitas culturales. Es una de esas escapadas rurales cerca de Madrid para descubrir la naturaleza sin renunciar a la comodidad máxima. Al menos una vez en la vida merece la pena invertir en un hotel de este tipo.
Rascafría y el Parque Natural de Peñalara
A una hora en coche de Madrid, Rascafría es una puerta de entrada al Parque Natural de Peñalara, una joya natural de montañas, bosques y lagos. El Parque Natural de Peñalara, es un espacio natural protegido de 768 hectáreas situado en la zona central de la Sierra de Guadarrama. También se localiza en la vertiente sureste del pico de Peñalara (2.428 m). Los amantes del senderismo encontrarán numerosas rutas para explorar, incluida la ascensión a este pico, la montaña más alta de la Sierra de Guadarrama. Además, hay tres pequeños circos, dos morrenas y una serie de lagunas, todo ello de origen glaciar. El paraje fue declarado como Parque Natural en 1990 por el Gobierno de la Comunidad de Madrid. Al parque se accede por varios caminos que salen del puerto de Cotos, un centro turístico de la región. En el espacio natural, muy visitado en días festivos, se puede practicar el senderismo, la escalada y el esquí de fondo durante el invierno. En el pueblo de Rascafría, puedes visitar el Monasterio de Santa María de El Paular y disfrutar de la tranquilidad del entorno.
Brihuega
Para los “likes” en Instagram, la visita a los campos de lavanda de Brihuega, en Guadalajara, es una de las mejores recomendaciones que se pueden dar. Respirar el aroma de la lavanda puede ser realmente embriagador y los amantes de lugares con encanto encontrarán aquí una gran ocasión para deleitarse. No por casualidad se ha ganado el nombre de “Jardín de la Alcarria”. No es precisamente una gran ciudad, pero podremos encontrar sitios para visitar como la iglesia de Santa María de la Peña, la Puerta de la Cadena y la Real Fábrica de Paños.
Estas escapadas rurales cerca de Madrid ofrecen una pausa perfecta para desconectar, respirar aire fresco y disfrutar de la belleza natural y cultural que rodea la bulliciosa capital española. Ya sea que busques aventuras al aire libre o simplemente relajación en un entorno tranquilo, estos destinos tienen algo para todos.