Escaparse a pueblos para salir de la ciudad es una moda al alza. Muchas veces cuando pensamos en hacer una escapada de fin de semana queremos un lugar cercano en el que poder pasar una o dos noche sin perder muchas horas en el viaje o, incluso, un lugar en el que poder disfrutar de un día diferente sin necesidad de hacer noche.
Viajar a otras comunidades autónomas incluso puede hacer que perdamos el viernes por la tarde completo y que volver el domingo se haga eterno sobre todo si vamos con coche por los atascos que muchas veces se forman en la carretera.
Eso quiere decir que solo disfrutamos del sábado al final y la escapada de fin de semana nos puede dejar más cansados y llegar el lunes al trabajo sintiendo que el viaje nos ha sabido a poco. La buena noticia es que en Madrid hay pueblos bonitos que podemos visitar sin necesidad de hacer kilómetros. Pueblos con naturaleza, otros con historia y algunos en los que podemos disfrutar de buena gastronomía lejos del mundanal ruido de la ciudad.
Los pueblos más bonitos de Madrid
Patones de Arriba
Si te gusta la historia te encantará Patones de Arriba. Desde sus edificios que provienen de las últimas décadas del siglo XX hasta la zona de la Dehesa de la Oliva, situada a unos cinco kilómetros y que cuenta con un yacimiento de restos arqueológicos que vienen desde el Paleolítico hasta la Edad Media.
Una de las cosas más bonitas del pueblo son sus casas de pizarra y la naturaleza montañosa que lo rodea.
Rascafría
¿Te gusta la sierra? Rascafría es un pueblo de Madrid situado en la Sierra de Guadarrama y además de ser bonito, también tiene algunos pedazos de historia que merece la pena visitar.
Uno de ellos es el Monasterio de Santa María de El Paular que data del año 1390 y que aún sigue activo y es regentado por monjes benedictinos. Sus piscinas naturales convierten a este pueblo en una de las mejores opciones para una escapada de fin de semana sin alejarse mucho de Madrid y para escapar del abrasador asfalto que asola la ciudad en los meses de julio y agosto. Además de las piscinas cuenta con cascadas y rutas naturales perfectas para un día de otoño o primavera.
Aranjuez
Aranjuez es otro de los pueblos reconocidos como los más bonitos de Madrid. Y no lo decimos nosotros, lo dice la UNESCO que lo reconoció en 2001 como Paisaje Cultural Patrimonio de la Humanidad. Aranjuez es una ciudad rodeada de agua y su Palacio Real es uno de los lugares más bonitos que ver en los alrededores de la ciudad. Los jardines como el de La Isla son inspiradores para un paseo otoñal romántico.
La historia está también impresa en este, más incluso que en otros pueblos de Madrid al ser el municipio que eligió Felipe II para hacer sus escapadas primaverales.
Manzanares el Real
Y para cerrar la lista de los pueblos más bonitos de Madrid nos vamos hasta otro que tiene naturaleza e historia. Manzanares el Real está al pie de la Sierra de la Pedriza, conocida por sus rutas de montaña y sus cascadas que en verano acogen a acalorados madrileños con sus mochilas, su picnic y sus bañadores.
Este es uno de esos pueblos que además está habitado por gente joven y tiene eventos como su mercadillo artesanal los primeros fines de semana del mes, en el que puedes encontrar desde cosmética natural hasta alimentación ecológica de la zona, pasando por prendas de ropa y bisutería además de toda clase de artesanía. También hay conciertos en la plaza algunos sábados.
El Castillo de los Mendoza, bien conservado, procede del siglo XV y se puede visitar por dentro, habitaciones y piezas de vestuario y armaduras incluidas.